El orgullo de Roger de Llúria

Un blog perico desde la lejanía

viernes, octubre 12, 2007

25 años (I): El inicio

Inicio hoy un breve periplo histórico del club vivido por un "espanyolista" en primera persona. Estará dividido en 5 capítulos, cada uno dedicado a un lustro vivido en blanquiazul.

Los comienzos

(Del primer encuentro hasta el Bernabeu 1982-1987)

Cuando uno tiene 8 años y sin equipo definido no es fácil encontrar motivos para la fidelidad deportiva. Seguía el fútbol sin definirme, o mejor dicho, definiéndome cada fin de semana. Era casi difícil mantener una afición por un equipo porque nada me llamaba la atención. El entorno no era el "idóneo" porque la bipolaridad Madrid-Barcelona también estaba en casa. Es raro, ni el Barcelona ni el Madrid eran equipos que me llenasen a pesar de que ganaban partidos cada dos por tres. Cualquier tontería me hacía decantar por un equipo o por otro y sólo un interés lejano, a pesar de vivir en Alicante, por el Hércules pues no había raíces para ello.

Pero llegó un evento en especial que me marcó de forma sorprendente, especialmente por el muy discreto papel de España en el Mundial de Fútbol que organizaba este país. Un Mundial que, en Alicante, también se vivió ya que jugó Argentina en el Rico Pérez y ese partido por el tercer y cuarto puesto(Francia-Polonia), en un evidente duelo entre Boniek y Platini. Pero para mí, el Mundial del 82 tuvo un protagonista que me marcó, un futbolista que iba más en consonancia con mi forma de ser. Ese futbolista, cancerbero a más señas, era camerunés y se llamaba Tommy N'Kono. Su papel en el Mundial fue brillante(un gol encajado en tres partidos) y me llamó la atención su forma de jugar, sus reflejos, etc.

El inicio de la temporada 82/83 me seguía sin llamar la atención, seguía la Liga con cierta distancia hasta que el destino me hizo la gran revelación: ese portero había fichado por el RCD Español(por su nombre anterior). Su fichaje hizo que prestara atención a ese equipo al que no había reparado. Desde entonces, he seguido al Espanyol. De repente, los Zúñiga, Orejuela, Márquez, Soler o Lauridsen se fortalecieron en mi mente. Ya estaba decidido: iba a ser del Español.

Y no fue fácil. El equipo, dirigido por Maguregui, era un ejemplo de regularidad bastante irregular: no acertábamos a ganar varios partidos consecutivos, perdíamos cuando menos nos los esperábamos pero luego los resultados revelaban que los equipos pequeños, a veces, eran arrasados en Sarriá pero, luego, el equipo blanquiazul no lo hacía bien en el Nou Camp, el Bernabeu o el Luis Casanova. De aquellos años me quedo con el recuerdo de una victoria al Valencia por 5-2, remontando el 0-2 inicial o, con Azkargorta, aquel espectacular 2-4 en La Romareda. Pero ganar al Barcelona era algo diferente: aquel 1-0 en la 83/84 con tanto de Orlando Giménez. Otro día que recuerdo agradable fue aquel tanto de un jovencísimo Michel Pineda al Athletic de Bilbao; el delantero hispano francés era un prodigio delante de portería, nuestro particular Julio Salinas, capaz de fallar un gol fácil pero marcar un tanto de extrema dificultad. Otro caso fue el debut de Soler, desde él no se ha vuelto a tener un lateral izquierdo en condiciones.


La temporada 85/86 me trae al recuerdo dos hechos importantes: el primero consistió en el liderato que ocupó el Español tras ganar 5-0 al Cádiz en la jornada inaugural. Fue breve pero para mí fue algo nuevo; por desgracia, una racha mal le llevó hacia abajo. Fue una temporada discreta en la que no se ganó fuera en toda la temporada y eso fue por poco. El segundo recuerdo fue aquel lejano 14 de abril de 1986: el equipo blanquiazul jugaba en Alicante y yo iba a verlo, era mi primer Hércules-Español; por aquel entonces , ambos equipos formaban parte conjunta en mi afición al fútbol. El inicio fue explosivo: 0-1 al minuto de juego; el Hércules empató a uno. En los últimos instantes, el colegiado pitaba penalty a fav0r del Español; sin embargo, el equipo no debía ganar fuera porque la pena máxima ejecutada por Lauridsen se fue por encima del larguero. Se esfumaba la ocasión de ganar ante un rival que ya había firmado su descenso virtual una semana antes en Mestalla.

La temporada 86/87 empezaba con un cambio fundamental: Azkargorta se iba y Antonio Baró contrataba a Javier Clemente. Con él llegaba el "héroe" azulgrana de Göteborg, el ex culé "Pichi" Alonso; también destacaba el fichaje de un joven extremo, Ernesto Valverde, que procedía del Sestao. Un portero venía a disputar la titularidad a N'Kono. El pobre no tuvo la suerte de jugar habitualmente pero su paciencia se mereció que fuera protagonista algún día: Carlos Meléndez.

Esa temporada resultó ser la mejor que viví desde que me hiciera "perico". Es obvio que disfruté de aquellas victorias a través del transistor pero también desde la tele pues la TV3(menos sectaria en sus inicios) comenzaba a emitir en Alicante. Aquel golazo de Soler en la vetusta Condomina, los goles de Pineda y de Pichi Alonso, aquel 5-0 al Mallorca o el tuteo en condiciones en el Bernabeu(2-2 en la última jornada de la liguilla). De aquella época, el protagonismo perico estaba incluso sin quererlo el equipo: aquella foto de Butragueño con cierta parte del cuerpo fuera se tomó en un encuentro ante el Español.

Ese Espanyol ilusionaba con un juego que, por desgracia fue decayendo en años posteriores...pero eso formará parte del segundo capítulo(1987-1992)

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